¿Qué piensas? ¿Qué sientes? ¿Qué dices?
¿Crees que las cosas ocurren simplemente? …
Lo cierto es que, si crees que es así y estás leyendo este artículo, es probable que haya llegado el momento de intentar modificar esa creencia. En nuestra vida no existen tales cosas, como los accidentes, las casualidades o las coincidencias. Nadie es víctima de las circunstancias o voluntad de alguien. Todo, absolutamente todo lo que te ocurre o ha ocurrido, lo has pensado o sentido en tu vida de forma consciente o inconsciente. Tus fantasías acerca de los temores, suposiciones, juicios o de lo que te hayan dicho otros y lo aceptaste como verdad solamente han dependido de ti. Todo cuanto acontece, sucede como un acto intencionado y decretado por el pensamiento y la emoción.
Todo lo que alguna vez hayas pensado, cada una de las fantasías que hayas tenido, todo aquello de lo hayas hablado, ha ocurrido o está por ocurrir. Porque, tal como piensas creas tu vida a través de esos pensamientos.
La fórmula:
Yo pienso + Yo siento + Yo digo = Crea mi realidad
Por ello te invito a que comiences a convertirte en el observador de tus pensamientos, siguiendo con esta fórmula sencilla, observar lo que piensas, las emociones que sientes y las palabras que empleas en tu comunicación contigo y con las otras personas. Es el primer escalón para comenzar a mirar y así entender lo que está pasando en tu vida, ya que no son los demás los que son responsables de lo que te ocurre o ha ocurrido en tu vida. Eres tú y la forma de cómo percibes tu entorno.
Para aprender a observarte, podemos comenzar por escuchar las palabras que decimos que son reflejo consciente o inconsciente de la manera en que pensamos y sentimos.
Ejemplo: Si tienes un deseo profundo de hacer algo diferente y constantemente y te dices:
No es el momento…
No puedo, por falta de tiempo…
No me atrevo… y si fracaso
¿Qué pensarán de mi?
No soy capaz
No me siento seguro
Algún día lo haré
No tengo suficiente dinero
No creo que sea el momento de hacerlo…
Si te identificas con alguna de estas frases o descubres otras nuevas en este sentido, te invito a hacer este ejercicio:
Si te enfrentas a algo nuevo y te dices NO me siento seguro, no puedo, etc. En ese mismo instante acéptalo y al mismo tiempo intenta construir una frase en la que des un nuevo giro al significado.
Ejemplo:
No me siento seguro de poder hacerlo
Cambiar la frase por:
Aunque no me sienta seguro, no pierdo nada probando ya que puedo aprender algo nuevo.
De esta forma comienzas a cambiar estos diálogos, para mejorar tu comunicación activando tu creatividad y renovarte. Usa tu creatividad y comprométete a mejorar tu comunicación, verás como cambia la manera de entender la vida a través de lo que piensas, sientes y dices.
No pierdas un día más y pasa a la acción…
Si necesitas más información aquí estoy para proporcionártela
Carmen Yates Martínez cyates@carmenyates.com